Cada 25 de enero, en Argentina, se conmemora el Día del Reportero Gráfico para conmemorar al fotógrafo José Luis Cabezas, asesinado en General Madariaga un día como hoy en 1997. El crimen significó un atentado a la libertad de expresión y continúa siendo recordado después de 27 años.
El asesinato ocurrió luego de que Cabezas fotografiara al empresario Alfredo Yabrán, acusado por el exministro de Economía Domingo Cavallo de ser “jefe de una mafia enquistada en el poder”. Hasta entonces, sólo se conocía el nombre del empresario, pero no su cara y, él había incluso llegado a decir: “Sacarme una foto a mí es como pegarme un tiro en la frente”.
La fotografía tomada por Cabezas fue, entonces la primera vez que se vio el rostro de Yabrán en un medio. En la imagen, publicada luego por la Revista Noticias, se veía al empresario caminando por las playas de Pinamar con una malla a cuadros blanca y bordó.
Al año siguiente, en la madrugada del 25 de enero de 1997, Cabezas fue secuestrado a la salida de una fiesta organizada por su amigo y empresario Oscar Andreani y, luego, asesinado en General Madariaga, una localidad bonaerense cercana a Pinamar.
El cuerpo del fotógrafo fue encontrado horas más tarde en el interior de un Ford Fiesta. Tenía las manos esposadas en la espalda, dos tiros en la cabeza y había sido golpeado y calcinado. Su muerte ─a tan solo 35 años y pocos meses desde el nacimiento de su hijo─ se transformó en un emblema de lucha por la libertad de expresión en el país.
La conmoción por el hecho llevó a que, el 13 de octubre de ese mismo año, el Congreso Nacional promulgara la ley 24.876 que establece el 25 de enero como el Día del Reportero Gráfico. Se trata de una iniciativa que cuenta con el apoyo de la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (ARGRA).
Al año siguiente, en 1998, la Justicia ordenó la captura de Alfredo Yabrán, quien pasó era considerado el autor intelectual del asesinato. El 20 de mayo, a tan sólo 5 días de que se emitiera la orden, la policía llegó a su estancia en Entre Ríos para detenerlo, pero el empresario se terminó quitando la vida de un disparo en la boca.
El crimen, sin embargo, derivó en otras detenciones. Por él, fueron condenados a prisión perpetua el jefe de Custodia de Yabrán, Gregorio Ríos y el comisario de Pinamar, Alberto Gómez. Este último estaba acusado de liberar la zona para permitir que ocurriera el asesinato. También recibieron sentencia los cuatro integrantes de la Banda “Los Horneros” de La Plata ─Horacio Braga, José Auge, Sergio González y Héctor Retana─ y los policías Sergio Camaratta, Aníbal Luna y Gustavo Prellezo.
Pese a las condenas, actualmente ninguno de los culpables está cumpliendo su condena dado que fueron liberados luego de verse beneficiados por la reducción de sus respectivas penas.
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