En estado de abandono | Norte Chaco – Diario Norte

Jefe de Redacción
Cuando la realidad supera a la ficción es porque ocurren cosas que mueven de eje a la lógica común establecida como lo normal en una mayoría de personas. Eso parece ser lo que pasa con los momentos difíciles que se viven en el país y en nuestra provincia que provoca daños sociales dolorosos. La inflación de diciembre 2023 en sólo dos semanas y media de la nueva gestión nacional de La Libertad Avanza y de la mano del ministro de Economía Luis Caputo, fue en el país del 25,5 por ciento que contrasta con el 12,8 de noviembre.
Los datos oficiales históricos indican que este es el valor mensual más alto en 32 años ya que la última vez que había superado esta cifra fue en febrero de 1991 con un índice del 27 por ciento.

De este modo terminamos el año con un incremento del 211,4% anual, un nivel que, para un fin de año, no se registraba desde diciembre de 1990 cuando llegó al 1.344% en el tramo final de la dolorosa hiperinflación.

Hoy se puede afirmar que vivimos en un estado de abandono y desamparo que alimenta cada vez más la angustia de la mayoría de las familias en un verano que sube día a día su temperatura. 

El índice inflacionario nacional pero especialmente los números del Chaco parecen  confirmarlo a medida que transcurre un calendario sin tregua en un período que debería ser de vacaciones para el descanso para iniciar la actividad de un año en el que escasea el optimismo.    

Los efectos de la vigencia del Decreto nacional de Necesidad y Urgencia liberaron todo y como la caja de Pandora permitió que los precios de los alimentos, los combustibles, las tarifas de los servicios y los impuestos levantaran un vuelo sin fin a un costo social grave y peligroso.

En los últimos días NORTE reflejó periodísticamente numerosas expresiones de los distintos sectores del trabajo y la producción impactados por el nuevo país planteado por la actual administración federal.

Por lo menos los relevados hasta ahora marcaron más críticas que beneficios a las medidas que impone el megadecreto nacional. Los detalles de los daños que expusieron desde el empresariado industrial, supermercadista, panadero, turístico, transportista de logística y de servicio público más la franja gremial de trabajadores tanto del sector privado como del público, plantearon una situación de incertidumbre y de un estado ausente como para atenuar los daños.


LOS DUROS NÚMEROS DEL CHACO 

Nuestra provincia mostró los peores números del país en diciembre pasado con el muestreo del Gran Resistencia, con los que logró el podio nacional logrado con el 29,53 por ciento de inflación. También midió la más alta a nivel interanual con el 220.96 por ciento.

¿Quién tuvo la responsabilidad en tan pésimo desempeño? Repasemos: en el mes de diciembre 2023, el Transporte y comunicaciones subieron 39,28 y Bienes y servicios varios 36,96 por ciento.

En Aceites y grasas los números llegaron al tope con el  49,50 y los Productos de panificación, cereales y pastas a 36,66 por ciento y  presentaron los mayores aumentos en términos mensuales respecto de noviembre 2023, todo seguido de las carnes que empujaron la suba con un 35,53 por ciento.

Para tener en cuenta, los números de nuestra provincia también plantean una muestra de cómo nos va en este nuevo escenario nacional. En términos interanuales el impacto en Atención de la salud fue del 248,36 por ciento y Alimentos y bebidas aportaron con un 245.11 puntos.


¿HAY UN FINAL, UN LÍMITE? 

El presidente del Banco Credicoop, actual diputado nacional y ex vicepresidente del Club Boca Juniors tuvo una definición en otra crisis profunda que padeció nuestro país. La reflotó para la actual a  modo de respuesta al interrogante. «»El límite del ajuste es la capacidad de resistencia de los ajustados»».

Para tratar de entender lo que vendrá en este mes que transitamos aún continúan los efectos de la devaluación con remarcaciones masivas en alimentos y bebidas pero además se suma como anticipa que febrero arrancará con una serie de tarifazos que promete facturaciones multiplicadas por tres como mínimo.

Al inminente aumento del gas y las tarifas de la electricidad más la del agua a la que le impactan los insumos con componentes importados, se sumarán las audiencias públicas para definir el nuevo costo del boleto del transporte público de pasajeros para el área metropolitana del Gran Resistencia convocadas para el 26 y 29 de febrero. 

El empresariado ya marcó la cancha y puso como piso un boleto a 1.000 pesos pero advirtió que en este precio no figura el ajuste por el aumento de salarios producto de la paritaria con sus trabajadores que también se aportará volumen al estudio de costos para los encuentros de fines del mes que viene. 

Pero no todo termina aquí. En el horizonte se vislumbran señales de una tormenta perfecta con una nueva devaluación similar a la inicial que de la mano de Caputo impuso la gestión Presidencial de Javier Milei. En el nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional está la pista por lo que se estima que en marzo o abril se efectivizaría la medida para responder a la magnitud de los aumentos de precios y la depreciación nominal del peso.

El momento genera en la mayoría ciudadana el lógico sentimiento de agobio y angustia por una carrera irrefrenable y sin límites de aumentos que licúa y hace desaparecer los pesos de sus salarios. Así consolida la percepción de un Estado que abandona y desampara ante el embate de una crisis que adopta características históricas. Y será así porque la política del Estado nacional dispuso liberar todo y no entrometerse en nada con el cuestionado DNU.


¿SE VE AL PRESENTE REPETIR EL PASADO?

En este punto vale repasar dos hechos muy graves y extremos que vivió la Argentina. El primero de ellos ocurrió en 1989 durante la presidencia de Raúl Ricardo Alfonsín cuando se sufrió el proceso hiperinflacionario más grande de la historia reciente con un 3.079 por ciento anual. 

Este cuadro económico y social insostenible llevó a que Alfonsín adelantara las elecciones en las que se impuso el candidato peronista Carlos Saúl Menem quien asumió el 8 de julio en el mes del pico inflacionario con 196,6 por ciento. 

En 1990 con Menem también hubo una réplica hiperinflacionaria que cerró el año con 2.134 por ciento y un pico en marzo de 95,5 puntos porcentuales.

La otra lección que nos dio la historia se vivió en el 2001 durante la Presidencia de Fernando De la Rúa por sus decisiones sobre la economía que culminó en un estallido social de proporciones. En este proceso con estado de sitio incluido perdieron la vida 39 personas en todo el país, dos de ellas en la provincia de Corrientes. El hombre de la alianza impulsada por el radicalismo con su plan «un peso, un dólar» tuvo que renunciar y los que mantienen la memoria fresca deben recordar su lamentable salida de Balcarce 50 en helicóptero, otra enseñanza histórica pero escrita con sangre.  

Hoy con una oleada de nuevos desocupados y trabajadores que ven cómo se licúan sus salarios con la pérdida de poder adquisitivo más los delicados datos sociales (más pobres e indigentes) 2024 quedará con otra marca histórica por el alto nivel del Indice de Precios al Consumidor que por su nivel nos lleva a mirar lo que pasó en 1989 – 1990 (hiperinflación) y en el 2001 con su estallido social. 

Son dos los momentos difíciles en las últimas tres décadas que dejaron su marca en la historia, hasta ahora. Cuando pase la actual tormenta se podrá evaluar el nivel de los daños sociales de la crisis y si se suma al doloroso pasado argentino de los últimos 30 años. Que no sea otro golpe a una sociedad que merece terminar con la condena de repetir el pasado una y otra vez.
Jefe de Redacción.

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