El periodista de 64 años está internado desde junio en el Hospital Italiano, con un traslado de corta duración a la clínica de neurorehabilitación Santa Catalina, y a lo largo de los meses quedó en suspenso desde la continuidad de su programa radial hasta la puja de poderes legales que ostentan su actual esposa, su exmujer, Sara Stewart Brown, y sus hijas, Lola y Bárbara.
«Yo no veo la hora de que esté en casa. Hay que tener mucha paciencia, ya ‘paciencia’ es una palabra que tengo tatuada», agregó Marcovecchio por su parte mientras buscaba el modo de apaciguar las habladurías sobre el supuesto tire y afloje con sus hijastras.
«En el Hospital, Jorge tiene que ver una sonrisa de mi parte. Por eso, no quiero pensar en las críticas», comentó.
Durante la tarde del jueves el Hospital Italiano emitió un nuevo parte médico de Jorge Lanata en el que consta que «se encuentra vigil, afebril, en ventilación mecánica durante la noche, mientras que en el día permanece con ventilación espontánea».
Además, el parte médico detalló los procedimientos que está siguiendo: “El tratamiento incluye anticoagulantes debido a una trombosis venosa profunda en miembro superior. También se encuentra realizando rehabilitación motora y fonoaudiológica, con buenos resultados hasta el momento”.
La actualización coincide con las declaraciones de Bárbara Lanata, quien días atrás había llevado tranquilidad al público al remarcar los avances positivos en la recuperación de su padre.
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