Confirman que en el tiroteo donde murió un policía, se dispararon 70 balazos

De los otros tres efectivos heridos en la balacera, uno permanece internado en grave estado. Lo mismo ocurre con el agresor, identificado como Hugo Jorge Javier Castro, quien se encuentra en una sala de Alta Complejidad del Hospital «El Cruce» de Florencio Varela.

En el ataque a los policías, se dispararon 70 balazos, según un peritaje realizado por Gendarmería

Un peritaje reveló este miércoles que en el enfrentamiento en el que este martes un hombre mató a un policía e hirió a otros tres cuando lo fueron a detener en la localidad bonaerense de Torres, en el partido de Luján, se dispararon 70 balazos.

En tanto, uno de los tres efectivos heridos continuaba internado en grave estado y, por otro lado, se llevó a cabo la inhumación de los restos del sargento asesinado Hernán Coll.

El velatorio comenzó a las 10 en una cochería ubicada en 25 de Mayo y Humberto Primo, de Torres, y luego se realizó el sepelio en el cementerio Parque Los Pinos, tras un paso por el frente de la Basílica de Nuestra Señora de Luján.

Los voceros informaron a Télam que aún permanece en grave estado el oficial inspector Gonzalo Núñez, quien recibió dos disparos durante el mismo procedimiento en el que mataron a Coll.

El oficial herido fue trasladado en un primer momento al hospital de Luján y luego derivado al Centro Médico Integral Fitz Roy, ubicado en el barrio porteño de Villa Crespo.

«Tiene una herida de bala en la pierna y otra en la mandíbula, pero no está en riesgo su vida», explicó a Télam una fuente judicial, que agregó que el estado de gravedad está señalado por el tiempo de recuperación que le tomará.

Por otro lado, el oficial Malcon Neri Churquina se encuentra fuera de peligro tras sufrir una fractura de costilla producida por un impacto en el chaleco antibalas, mientras que el teniente Víctor Hugo Díaz recibió un tiro en una de las manos y ya fue dado de alta.

Por su parte, el agresor, identificado como Hugo Jorge Javier Castro (35), se encuentra internado en una sala de Alta Complejidad del Hospital «El Cruce» de Florencio Varela y su estado es grave, ya que recibió un balazo en la zona del tórax y otro en la cabeza.

«Tiene el hígado comprometido, perforaciones en el pulmón, entre otras cuestiones», indicó la fuente consultada.

A su vez, los peritos de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) determinaron en forma preliminar que en el lugar del enfrentamiento se produjeron al menos setenta disparos de distintos calibres, añadieron las fuentes judiciales.

Feroz ataque

De acuerdo a la investigación, Castro atacó a los policías cuando fueron a detenerlo en el marco de una causa por abuso sexual y violencia de género contra su expareja.

Todo comenzó ayer cerca de las 10 cuando los efectivos fueron a buscar al acusado a su casa de la calle Blas Pascal al 900, de Torres, ya que el hombre tenía pedido de captura ordenado el 5 de mayo último por Juzgado de Garantías 2 de Campana, a pedido de la fiscal Irene Molinari.

Las fuentes indicaron a Télam que al llegar al lugar los efectivos fueron recibidos a tiros, por lo que se inició un enfrentamiento.

A raíz del hecho, el sargento Coll, de la comisaría 3ra. de Luján, recibió dos disparos y murió cuando era trasladado al hospital, mientras que tres de sus compañeros fueron heridos al igual que el agresor.

Los voceros añadieron que la policía secuestró una pistola Bersa Thunder 9 milímetros que tenía un pedido de secuestro activo de la comisaría 9na. de San Isidro por haber sido robada el 18 de diciembre de 2011.

Lo ocurrido es investigado por la fiscal María Laura Cordiviola, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 10 de Luján, quien estuvo en el lugar del hecho al frente de las primeras diligencias de rigor.

Además, la fiscal dispuso la aprehensión de la mujer que se encontraba junto a Castro al momento del hecho por entorpecer el trabajo judicial.

Según el pedido de detención del Juzgado de Campana al que Télam tuvo acceso, la exesposa de Castro declaró que hasta febrero mantuvo una relación con él, con quien estaba casada y tuvo seis hijos.

La expareja efectuó denuncias ese mes por la violencia que padeció por parte del hombre, el cual fue «excluido del hogar en el que residían juntos y se le ordenó una restricción de acercamiento, la que no habría cumplido, debido a que se presentó en varias oportunidades en su casa, portando un arma de fuego, con la cual la golpeaba y amenazaba».

De esta manera, la fiscalía solicitó la detención, que fue avalada por la Justicia, aunque recién este martes el sospechoso fue localizado.